marzo 13, 2012

Viaje a bordo de cuatro ruedas

El afán por salir corriendo, alcanzar a tomar la ruta y por favor que no se me haya quedado ninguna copia para estudiar para el parcial de la tarde que haya traído dinero suficiente para los tres combos y afortunadamente mi maletín se encuentra repleto de libros con fecha para renovar en la biblioteca y ojalá que la fila no sea tan larga porque siempre que es lunes los choferes no tienen cambio para un billete de veinte mil mi única compañía monetaria para el resto de la semana tocará administrarlos muy bien si quiero tomar frappé el miércoles con esta nena que conocí el viernes pasado y por casualidades de la vida también estudia en la misma universidad y va unos semestres más avanzada y precisamente tiene que estar lleno el bus y no falta la expresión de insatisfacción de favor correrse para atrás y del fondo le responden si está llevando vacas y acelera por solidaridad y se pasa de  las paradas unos metros más adelante cooperando con el descontento matutino de los pasajeros amanecen con más arrugas que de costumbre y eso que la rumba fue el sábado y el maletín es más incómodo para las señoras con amplios bolsos de cuero atravesadas en el camino como si todo el pasillo fuera para una fila india pero ellas parecen indias en fila quejándose por el joven que intenta pasar estirando sus piernas cual garza caminando por la costa en busca del pescado que hace tiempo no veo en un plato de comida por eso de la economía aunque siempre la prudencia está de más y no falta la señorita cómodamente sentada con el prominente escote por el que se escapan los sentidos de los incómodos hombres que vamos de pie en la reducida cabina del transporte urbano que se respete debe tener los altoparlantes al son de las emisoras más populares con sus noticias buenas es las que espero recibir la otra semana cuando me entreguen los resultados del parcial de esta tarde voy a ver si llamo a esta nena para confirmar lo del miércoles voy a invitarla a cine de fin de semana a pesar que andemos cortos de dinero y que no se me olvide pedir los vueltos del billete antes de bajarme en el estadio porque como ahora no pasan por enfrente de la universidad y le ahorraban a uno el carrerón que voy a tener que pegar para no tener que ser de los últimos en la fila pero la biblioteca está abierta desde las seis de la mañana hasta las cuatro de la tarde del domingo estuve terminando el trabajo escrito para lo literatura y el profe siempre llega temprano no importa el día amaneció con ese aroma de humedad de frío tan verraco el que está haciendo por estos días y cuando el reloj marca las doce ese solazo cayendo con fuerza sobre la capital se ve tan distinta detrás de la ventana del asiento que por fin pude conseguir gracias a la señora que se compadeció de la incomodidad de los puestos está en que me toca subir las rodillas y acomodar el pesado maletín lleno de libros y trabajos y deudas y ganas de ir el baño las que me tengo con tanto afán por llegar a tiempo a clase de 8 am en la universidad.

1 comentario:

Jhon Monsalve dijo...

Este tipo textos, Víctor, me hace sentirme tan conmocionado que incluso lloro y río por ese hecho extraño al que llaman catarsis.

Bienvenidos a mi blog

Saludos, visitante. En mi blog encontrarán cuentos,poemas, especulaciones, crónicas, artículos de opinión, mi trayectoria como Narrador Oral, videos y una que otra cosa digna de anticuario. Estaré atento a sus comentarios. Buen viento y buena Mar. Víctor Andrés Zaraza Méndez. vitomania04@hotmail.com